Alejandro Cepero con sólo 13 años posee un gran dominio de las artes marciales

Cuando sintió el primer impacto de sus puños, Osvaldo Cepero se dio cuenta que estaba delante de algo diferente. Su pequeño Alejandro poseía una fuerza y una agilidad sorprendentes para un niño de apenas tres años. Tal vez por eso para su próximo cumpleaños le hizo un regalo inusual: lo llevó a un dojo de Karate-Do.

Lo que comenzó entonces como un simple juego entre padre e hijo se ha convertido en la actualidad en material de leyenda, porque el nombre de Alejandro Cepero es sinónimo de excelencia en un arte marcial complicada que el chico domina con una facilidad pasmosa para sus 13 años de edad, al punto que hoy se le considera un embajador internacional de la disciplina.

“Nunca olvidaré ese primer día en que entré a una centro de Karate, fue como si se abriera un nuevo mundo para mí’’, expresó el chico nacido en Miami de padres cubanos. “No sé cómo explicarlo pero todo lo que me enseñaban me llegaba sin problemas. Siempre quería aprender más y más. No me gustaba faltar a ninguna clase y pronto empecé a destacarme en competencias, a ganar torneos, a darme a conocer. Todo pasó bastante rápido’’.

Desde los seis años, el nombre de Alejandro sonó con fuerza en los circuitos de Karate de Miami y pronto el muchacho comenzó a labrarse una reputación por su depurada técnica en la ejecución de Kata, que es la exhibición de movimientos, y Kumite, la parte de combate. Sus videos en YouTube han sido vistos por miles de personas en todo el mundo y no son pocos los elogios recibidos por algunas de las personalidades más grandes del deporte.

Hoy, Alejandro suma 97 primeros lugares, 12 títulos de campeón nacional y ha conquistado tres veces el US Open contra deportistas de más de 48 países y tres veces los Juniors Olimpics. A su edad nadie había ganado tantos trofeos en la historia y la marca de ropa deportiva Adidas decidió patrocinarlo como parte de sus campañas publicitarias.

Los elogios le llueven de todas partes y ha recibido condecoraciones y homenajes desde Puerto Rico a República Dominicana, hasta personalidades como Arnold Schwarzenegger y varios presidentes.

Incluso, hasta es un personaje de un programa como The Legend of Lionman, apoyado por la Casa Blanca para promover la actividad física en los niños. Para este programa, y su libro de historietas, fueron seleccionados siete jóvenes de varias partes del mundo para representar a siete héroes diferentes en artes marciales, Alejandro Cepero, está entre ellos.

“Todo el mundo me dice que la fama me ha llegado pronto, pero para mí el Karate está por delante de todo y creo que en este caso sirve para una buena causa’’, afirma Alejandro, quien cursa estudios secundarios en Glades. “Más allá de todo lo que pueda venir en el futuro, estoy consciente de que el Karate es un camino de superación constante y de no tomar nada por sentado. El día en que me aparte de esa línea, estaré cometiendo un gran error’’.

Pero todos aquellos cercanos a Alejandro creen que eso nunca sucederá. A pesar de haber pasado por las manos de prestigiosos maestros y haber disfrutado de la atención en escenarios de lujo, al chico parece no abandonarle nunca un aire de humildad y condescendencia, acompañado de modales suaves que lo acercan irremediablemente a todo el que se le acerca.

Toda esa cortesía desaparece cuando Alejandro, un cinta negra junior, viste el kimono y se apresta a realizar una Kata o iniciar una acción de combate.

“Es un competidor nato y es como si le entrara un fuego por dentro que lo separa del resto en calidad e intensidad’’, indica Raymel Llerena, su entrenador actual y consejero. “Sus condiciones y habilidades asombran a su edad. A veces terminamos de practicar y el sigue pidiendo más. Desde niño disfrutaba mucho el Karate y nunca lo vio como una carga sino como una pasión. Y creo que apenas estamos viendo la punta de lo que puede alcanzar. Alejandro no tiene límites y para mí es el verdadero Karate Kid’’.

En breve comenzará la filmación de un documental bajo ese mismo título y existen grandes posibilidades de que Alejandro forme parte del elenco de la próxima entrega de la legendaria saga cinematográfica Karate Kid, ya sea como protagonista o como la contrapartida del hijo del actor Wil Smith, Jaden, quien se convirtió en estrella de la primera entrega junto a Jackie Chan.

Pero más allá de lo que pueda venir en la vertiente del espectáculo, Alejandro entiende que tiene una misión más importante en el Karate.

“Me atrae eso de la actuación, pero como forma para seguir promoviendo el Karate’’, recalcó. “Quisiera que cada vez más niños pudieran practicar este deporte y descubrir que es muy bueno y te hace mejor en todos los aspectos. No sé si seré o no Karate Kid, pero sí estoy seguro que pase lo que pase siempre amaré al Karate y a mi padre, que me hizo un regalo tremendo desde aquel día en que me llevó a un Dojo’’.